Urnas quemadas, episodios de violencia y versiones cruzadas entre los principales candidatos presidenciales, el fondo de una elección caliente.
Las imágenes de las urnas quemadas se repiten en todos los medios de comunicación, mientras la clase dirigente se divide entre echar culpas y celebrar una victoria: las elecciones en Tucumán, como si fuera una puesta en escena dramática, son el fondo en el que la contienda electoral nacional parece dirimir una violenta batalla previa a octubre.
Con el 81,55 por ciento de las mesas escrutadas, el Frente para la Victoria, con la candidatura a gobernador del exministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, se imponía con el 57,42 por ciento de los votos, contra los 13,66 puntos del Acuerdo por el Bicentenario, el frente opositor que llevó como candidato al radical José Cano.
En el medio, las denuncias sobre episodios de violencia que tiñeron la jornada electoral: el secretario de la Junta Electoral de Tucumán, Darío Almaraz, confirmó que fueron quemadas 42 urnas y que seis gendarmes resultaron heridos por los incidentes ocurridos en distintos municipios de esa Provincia.
«Si Alperovich, Manzur y Scioli están tranquilos, va a haber que abrir las urnas para que se verifique una por una», sostuvo el jefe de Gobierno porteño y candidato presidencial por Cambiemos, Mauricio Macri. «Es una situación realmente inaceptable, no la podemos naturalizar ni creer que esto es parte de nuestra democracia», agregó el líder del PRO.
Sergio Massa se pronunció también en ese sentido, y aseguró que «en una provincia donde hasta la una de la mañana no se había cargado un solo telegrama, me parece que algo tapaba. Hay que ser responsables e ir a la apertura de urnas».
En tanto, desde el Frente Para la Victoria el mensaje era completamente diferente. Daniel Scioli, quien estuvo en Tucumán para acompañar al candidato oficialista, les contestó a sus competidores en la carrera por la presidencia, y pidió respetar “la voluntad popular”.
“Hay que respetar la voluntad popular. Las reglas son las son; la gente vota y, sea cual sea el resultado, se debe respetar la voluntad popular”, sostuvo el gobernador bonaerense, y puso el acento en el hombre del PRO: “Que Macri, por respeto al pueblo tucumano, reconozca la victoria del Frente para la Victoria como yo lo hago con los gobernadores electos que no son de mi partido, por ejemplo con (el radical Alfredo) Cornejo en Mendoza”.
El gobernador saliente, José Alperovich, también se sumó a las críticas del mandatario bonaerense y desafió a los opositores: «Si la oposición y la Junta Electoral quieren abrir las urnas y recontar, que lo hagan», aseguró, y planteó que la elección se desarrolló con «total transparencia».