El conductor del gremio anunció que pretenden llegar al mínimo vital y móvil de $ 3.900. También reclamará la eliminación de horas extras.
El futuro conductor del gremio, Juan Montenegro, planteó los lineamientos de su gestión.
El próximo 11 de diciembre se realizará el anuncio formal de la creación del sindicato de Policías y Penitenciarios (Sin.Po.Pe) de la ciudad de Olavarría, una iniciativa surgida con el fin de reclamar por diferentes reivindicaciones, principalmente, en cuestiones salariales.
En declaraciones al portal local Infoeme, el penitenciario Juan Montenegro, quien será designado Delegado General, dio detalles de la conformación del gremio y las principales líneas de trabajo que tendrá; que abre un llamado de atención tras los recientes sucesos de Córdoba.
“Nos vamos a presentar en sociedad el 11 de diciembre cuando inauguramos nuestra sede sindical en el local 29 del subsuelo de la Galería Vicente López. Luego vamos al Club Sierra Chica a un acto de conformación del gremio con todos los policías y penitenciarios. Están invitados los sindicatos de Olavarría porque, en mi caso como titular, formo parte de la CGT Regional”, dijo el oficial del SPB.
Montenegro contó que la necesidad de agruparse nació en 2005, de la mano de la Asociación de Policías Heridos y Desamparados (APOHEDE), una organización nacional que reunía a efectivos con alguna herida en combate.
“Decidieron formar un grupo y fue creciendo hasta formar la institución gremial. Primero eran sólo policías pero luego se dieron cuenta que nosotros, los penitenciarios, también estamos en las mismas condiciones y así se forma Sin.Po.Pe”, relató el olavarriense.
Así, la iniciativa se fue extendiendo por diferentes localidades, llegando este año a la ciudad de Azul, desde donde le proponen a Montenegro ser Delegado General de la Seccional Olavarría, junto a otros integrantes de la Comisión Directiva.
Para el flamante dirigente, la problemática principal en la que deberá trabajar Sin.Po.Pe “es el tema de la situación salarial. Venmos batallando hace años porque tenemos un piso de 600 o 700 pesos de básico, es una realidad. No sé si hay otro trabajador con un básico de 600 pesos, una cosa de locos. Después nos pagan en negro, por decretos, resoluciones. Queremos que nos paguen lo que nos corresponde por el mínimo vital y móvil, que oscila entre 3600 y 3900 pesos”.
También, se refirió a la problemática de las horas extras que, en general, han devenido en un recurso para los trabajadores de ambas fuerzas para poder incrementar sus ingresos mensuales. Sin embargo, el penitenciario reconoció que “no queremos seguir recargando horas, no hay tiempo para vivir, para estar con la familia” y pidió mayores nombramientos para evitar las carencias de personal.
Por último, indicó que el Sindicato ofrecerá asesoramiento legal ante denuncias contra representantes de la fuerza, al advertir que “lamentablemente el hilo se corta por lo más delgado”.
La iniciativa busca respaldar a efectivos en caso de actos administrativos internos, para evitar exoneraciones por parte de la cúpula policial, sino recurrir a una vía de resolución judicial. InfoGEI