13-12-2018

Nuevo juez para investigar los aportes truchos de campaña

El caso saltó del fuero Criminal a la Justicia Electoral. El escándalo le costó el cargo de Contadora de la Provincia a María Fernanda Inza, que una semana antes había sido designada por Vidal.

Vidal y Maria Fernanda Inza

María Fernanda Inza al asumir el cargo de secretaria Legal y Técnica de la gobernación. Después saltó a la Contaduría y casi en simultáneo estalló el escándalo que motivó que Vidal la echara.

La Cámara Nacional Electoral definió que el juez federal con competencia electoral, Adolfo Ziulu, investigue la denuncia de aportes fraguados para la campaña 2017 de la alianza “Cambiemos Buenos Aires”, que desató un escándalo de alcance institucional cuando la responsable de esos fondos, María Fernanda Inza, fue echada por la gobernadora María Eugenia Vidal del cargo de Contadora de la Provincia, en el que apenas una semana antes la había designado.

En el mismo fallo, los jueces de la Cámara Alberto Dalla Vía y Santiago Corcuera, ordenaron al juez en lo Criminal y Correccional Federal 3 de La Plata, Ernesto Kreplak, que remita lo actuado en el expediente a Ziulu.

En los considerandos, los camaristas señalaron que “la recta interpretación de la ley de financiamiento de los partidos políticos (26.215) impone que todas las denuncias e impugnaciones sobre la legalidad del financiamiento de la campaña electoral de la que aquí se trata, sean investigadas y resueltas por el juez federal con competencia electoral”.

Inza era la tesorera del PRO a nivel provincial y como tal manejó los fondos de la campaña bonaerense en 2017, precisamente el nudo gordiano de la denuncia por los supuestos aportantes apócrifos que colaboraron con el oficialismo en las elecciones legislativas del año pasado.

De estrecha vinculación con el secretario general de Legal y Técnica de Nación, Pablo Clusellas, y de máxima confianza de Vidal, Inza reemplazó a Julio Conte Grand en la Legal y Técnica bonaerense cuando este saltó al cargo de Procurador.

Casi en paralelo, Inza fue designada como tesorera del PRO de Buenos Aires, máxima responsable de los recursos que el partido recibió y destinó para financiar las campañas que encabezaron Esteban Bullrich y Graciela Ocaña.

«La conozco, hace muchos años que trabaja conmigo; confío en ella. Pero le pedí la renuncia preventivamente para demostrar que no somos todos lo mismo», dijo Vidal durante una conferencia de prensa apenas estalló el escándalo, en un rápido intento por desactivar el escándalo que comenzaba a dañar su imagen.

Ahora es el juez Ziulu el que deberá determinar la responsabilidad de todos los actores de esta obra que tiene a Cambiemos en el banquillo, más allá de que el financiamiento integral de “toda” la política sigue bajo sospecha, porque claro está las cuentas no cierran por ningún lado.