14-05-2019

El 30% de las posiciones en tecnología quedarán vacantes para 2020

Por Felipe Girado (*) – Columna de la Agencia Télam

El 70% de los trabajos de hoy se tornarán obsoletos dentro de la próxima década y el 65% de los niños empezando la primaria terminarán trabajando en empleos nuevos que aún no existen. Pasen & Lean sobre la necesidad de una formación universitaria o terciaria en el sector de la transformación digital, para generar la cantidad de recursos que faltan.

Felipe Girado«Transformación digital»: el concepto está en las cabezas de CIOs de pequeñas y grandes compañías todo el tiempo, pero gran parte de ellos no han problematizado sus alcances. Las cifras parecen hablar por sí solas: 70% de los trabajos de hoy se tornarán obsoletos dentro de la próxima década y el 65% de los niños empezando la primaria terminarán trabajando en empleos nuevos que aún no existen.

Además de que el recurso es escaso y hay una “guerra por el talentos”, hay un desafío de formación en el sector, todavía en falta en el país. Hay, entonces, una situación de coyuntura, pero también desafíos enormes a largo plazo para lograr posicionar a Argentina como una usina de talentos. El argentino tiene una fama y una gimnasia de superar crisis y de adaptabilidad a los cambios que justamente es la base de las estructuras organizacionales en la era de la transformación digital. Ese es un skill y un perfil que es muy valorado y requerido. El desafío es que la formación universitaria o terciaria siga generando la cantidad de recursos que faltan, y que acompañen las políticas de Estado.

Para ganar y declararse vencedor en esta guerra por el recurso escaso, es vital pensar en el lado humano de la tecnología, una tecnología que acerque y que facilite. Las empresas proveedoras de tecnología tienen en esto un doble desafío: adoptar las innovaciones con rapidez y ser el catalizador del cambio con éxito, «evangelizando» sobre las nuevas prácticas. Tenemos una cultura agile que va más allá de la metodología: intentamos que agile también forme parte de la cultura empresarial.

En este complejo escenario, el buen clima laboral no puede ser dejado de lado. Si los trabajadores pasarán menos tiempo en sus «escritorios», es clave que ese tiempo sea optimizado y beneficioso. Así, la creación de «mesas de clima» es una herramienta casi ineludible para monitorear el engagement de los empleados y permitir que los mismos se apropien de mejoras e iniciativas para toda la compañía. En épocas donde la comunicación es clave, este tipo de iniciativas se vuelven muy ricas para el bienestar general de las organizaciones: los empleados valoran la colaboración y Recursos Rumanos, el feedback.

La apuesta está en emplear estratégicamente las virtudes de la transformación digital, acompañándola del lado humano singular e irremplazable. Al fin y al cabo, la sensación de comunidad y de pertenencia posibilitadas por la empatía, la cercanía y la comunicación interna, son prácticas que ningún algoritmo ni machine learning será capaz alcanzar.

(*) Director ERP (sistemas de planificación de recursos empresariales) de Axxon Consulting.