20-10-2013

Un centenar de heridos en otro accidente ferroviario

Ocurrió nuevamente en el anden donde se produjo, un año atrás, la tragedia de Once. Todas las sospechas apuntan al motorman.

El anden maldito. Nuevamente la estación de Once como epicentro de un accidente ferroviario. Por milagro, no se repitió la tragedia.

El anden maldito. Nuevamente la estación de Once como epicentro de un accidente ferroviario. Por milagro, no se repitió la tragedia.

Un total de 99 personas resultaron con heridas de carácter leve, aunque ocho de ellas quedaron internadas en observación, como consecuencia del descarrilamiento de un tren de la línea Sarmiento en la estación Once, lo que produjo un impacto similar a la tragedia ocurrida el 22 de febrero de 2012, que tuvo un saldo de 51 muertos.

Según confirmó el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, el motorman fue sorprendido cuando intentaba llevarse en su mochila el disco rígido que contiene las imágenes de seguridad de la cabina y no descartó que se haya producido un sabotaje.

«Respecto del sabotaje no descarto nada», sostuvo Randazzo en conferencia de prensa en la Casa Rosada, aunque remarcó que «será la Justicia la que deba establecer responsabilidades».

Fuentes policiales indicaron que el disco rígido fue encontrado con manchas de sangre en la mochila del motorman, poco después que varios pasajeros intentaran agredirlo, entre insultos.

El Ministro informó además que el registro de GPS instalado en la formación reveló que la formación «realizó todas las paradas correspondientes con total normalidad sin registrar ningún inconveniente», pero que recorrió los últimos 900 metros con exceso de velocidad, antes de ingresar al anden para estrellarse con el paragolpes «que estaban reparados y absorbieron el impacto evitando el acaballamiento».

La mayoría de los accidentados fueron derivados a distintos hospitales porteños y, luego de ser atendidos, fueron dados de alta, ya que sólo ocho presentaban un cuadro que requirió su internación o monitoreo en observación durante algunas horas más.

El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, y los ministros porteños Graciela Reybaud (Salud) y Guillermo Montenegro (Seguridad y Justicia), confirmaron esta mañana que fueron 51 personas las atendidas por el accidente ferroviario de la estación Once y remarcaron que no hubo víctimas fatales.

En ese sentido, brindaron una lista con los nombres y apellidos de todos los atendidos en los hospitales Penna, Ramos Mejía, Argerich, Rivadavia, Vélez Sársfield, Santojanni y Piñero, que puede consultarse llamando al teléfono 136.

Berni señaló que unas treinta personas «estaban esperando en el andén» y recibieron heridas al producirse el descarrillamiento, principalmente por el estallido de los vidrios.

En tanto, el secretario de Prensa del gremio de maquinistas La Fraternidad, Horacio Caminos, confirmó que el motorman de la formación que chocó se encontraba internado en el Hospital Ramos Mejía.

«Estaba delicado, en apariencia no corre riesgo de vida, pero como dicen los médicos el estado es reservado», explicó Caminos, quien detalló que «tiene 45 años y mucha experiencia, venía de trabajar en la línea Mitre».

El impacto de la formación Chapa 5 – que partió a las 6,18 desde Moreno- se produjo a las 7,25 sobre la barrera de contención del andén número 2, el mismo en el que hace un año y ocho meses se produjo la mayor tragedia ferroviaria de la historia de la Argentina, con 51 muertos y más de 700 heridos.

Este sábado el panorama fue diferente principalmente porque los vagones de la formación no iban atestados de gente como en aquella oportunidad, en una hora pico donde la mayoría se dirigía al trabajo.

Si bien es víspera del Día de la Madre y muchos viajaban a comprar sus regalos, los testigos y pasajeros admitieron que viajaban sentados y algunos de pie.

Según las primeras informaciones, se habría quedado sin frenos y se «pasó» de la línea de detención por lo que impactó contra las barreras de contención y quedó «subido» al andén.

Testigos del hecho indicaron que hubo «gente atrapada en el segundo y tercer vagón» mientras que señalaron que los frenos del tren «venían fallando desde la estación Ciudadela», seis estaciones antes de llegar a Once.

«Frenaba y largaba y se pasaba de la estación. Al llegar a Once no frenó bien y chocó», explicó uno de los pasajeros en declaraciones a la prensa fuera de la estación, que fue cerrada por la Policía.

Según varios testigos, un grupo de personas intentó «atacar» en la cabina al maquinista -que ya había sido trasladado-, lo que produjo un enfrentamiento con la Policía Federal, que terminó con al menos dos efectivos con heridas.

El SAME se hizo presente rápidamente en el lugar con un amplio operativo de emergencia, con el que se clasificó la gravedad de los heridos para su traslado, incluso algunos siendo atendidos en la calle, fuera de la estación, en una situación que recuerda las imágenes de aquel 22 de febrero de 2012.

Además del personal médico, efectivos de la Policía y personal de Bomberos se encontraban trabajando en el lugar donde al menos 16 ambulancias son las que concurrieron al lugar para asistir a los heridos algunos de los cuales fuero trasladados hacia el Hospital Ramos Mejía.

Este accidente se produjo en el mismo andén en el que ocurrió la llamada «Tragedia de Once, la cual dejó como saldo 51 personas muertas y más de 700 heridos.