Metido de lleno en la disputa por ese distrito clave del Conurbano, el gobernador encabezó un acto con su candidato para arrebatarle ese distrito al massismo.
Desde el sciolismo saben que arrebatarle al massismo el control de San Miguel es clave para tener el manejo de la primera sección electoral de la Provincia, por lo que las apariciones del gobernador Daniel Scioli con Carlos “Chino” Tapia, su delfín para ganarle la intendencia a Joaquín De la Torre, se multiplican.
Un ejemplo de esto se vio en el acto por el cual la administración sciolista entregó la solución habitacional 95 mil y un centenar de actas de regularización dominial y de consolidación a vecinos de San Miguel.
“Es un día especial para ustedes y también para nosotros, porque de todos los actos institucionales, estos son de los que más disfruto, porque comparto con ustedes la satisfacción de dejar atrás angustias e incertidumbre”, sostuvo el mandatario, presente en el evento a pesar de haber sufrido una quebradura de clavícula el fin de semana.
Con el exfutbolista de Boca Juniors a su lado, Scioli expresó su satisfacción de “poner al día un tema que venía esperando décadas y reparar esta situación de injusticia de familias que estuvieron esperando más de 25 años”.
Se trató, en definitiva, de otra demostración de poder que se envió desde el propio Ejecutivo provincial hacia De la Torre, uno de los intendentes massistas más críticos de la gestión sciolista.