21-08-2016

La Corte advirtió sobre la falta de un ombudsman

Por Carlos Constenla (*) – Columna del diario Clarín

Carlos ConstenlaEl fallo de la Corte Suprema de Justicia sobre las tarifas también advierte, en el segundo punto de la sentencia, sobre un hecho de enorme gravedad institucional: la falta del Defensor del Pueblo de la Nación, puesto vacante desde 2009. El gobierno anterior, que se ufanó de hacer de los derechos humanos su bandera, impidió que se cubriera el único cargo de la Constitución Nacional, previsto precisamente para proteger los derechos humanos. Tampoco el actual Gobierno ha hecho lo necesario para subsanar esa falencia. Sería ideal que replicara la energía que puso para integrar los cargos de la Corte Suprema en la tarea de designar al Defensor del Pueblo.

Se quiere hallar una solución política a un problema que no es político. La elección del Defensor del Pueblo debe recaer en una persona de probada idoneidad y prestigio moral, más allá de la política partidaria. Este instituto no fue concebido para gobernar, sino para proteger derechos; no tiene poder y ejerce una magistratura de opinión y de persuasión, de modo que la selección del Defensor debe estar inspirada en la idea de dar voz a quienes no la tienen, y no en el juego de intercambios de cargos para forjar acuerdos de gobernabilidad. No es posible que el Congreso no pueda hallar una persona digna sin compromisos políticos para desempeñar esta función.

El Instituto que integro ha expresado muchas veces su preocupación por esta situación, y analiza llevar la cuestión a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para que exhorte a la Argentina a cumplir con un mandato legal que también es ético, porque la vacancia hace sospechar una falta de interés de nuestros gobernantes en la defensa y promoción de derechos fundamentales.

(*) Presidente del Instituto Latinoamericano del Ombudsman (ILO). Expresidente de la Asociación de Defensores del Pueblo de la República Argentina (Adpra) y exdefensor del Pueblo de Vicente López.