13-05-2015

Eran pareja, Bossio se bajó pero Berni sigue en pié

Se fracturó el matrimonio que aspiraba suceder a Daniel Scioli. El administrador del Anses declinó su candidatura. El «Súper Secretario» redobló la apuesta.

Otros tiempos, Bossio y Berni juntos y a punto de iniciar un acto de campaña. Ahora el "Súper Secretario" seguirá solo en la pelea por la gobernación bonaerense.

Otros tiempos, Bossio y Berni juntos y a punto de iniciar un acto de campaña. Ahora el «Súper Secretario» seguirá solo en la pelea por la gobernación bonaerense.

Después del cimbronazo que significó el pedido de humildad de Cristina hacia el aluvión de precandidatos kirchneristas a la presidencia y la gobernación de la Provincia y pasado el impacto que significó el anuncio del primer desertor, el entrerriano Sergio Urribarri, que se bajó de la carrera por el sillón de Rivadavia derrotado por la medición cero en las encuestas, el inesperado abandono de Diego Bossio, causó sorpresa hasta en su propia tropa, que aún hoy, pasadas 24 horas del anuncio, sigue desconcertada. El que evidentemente la tiene clara es el secretario de Seguridad, Sergio Berni – hasta ayer compañero de fórmula del administrador del Anses-, que inmediatamente ratificó su intención de seguir en carrera por la sucesión de Daniel Scioli.

Como todos, eso sí, Berni supeditó su aspiración al aval de la Presidenta: «Si me pide que sirva café en la Gobernación, no tengo problemas», dijo en una demostración de desmedida obsecuencia.

Como se sabe, Bossio y Berni habían formado una de las parejas de los últimos meses. Planeaban competir juntos en las Primarias de la provincia de Buenos Aires, pero el pedido de «humildad» de la Presidenta fracturó el matrimonio.

Bossio explicó su decisión en una extensa carta dirigida a CFK pese a que el último fin de semana había participado de varios actos de campaña.

Berni, por ahora continuará anotado en la carrera. «Nosotros seguimos trabajando fuertemente en este desafío que nos hemos puesto de poder ingresar a las precandidaturas a gobernador», sostuvo.

Sin embargo, aclaró que su postulación está supeditada a lo que resuelvan sus «compañeros». La frase tiene otra lectura. Donde dice «compañeros» debe interpretarse «jefa política». «Si la Presidenta me pide que sirva café en la Gobernación, yo no tengo ningún problema», destacó Berni en diálogo con Luis Novaresio en Radio La Red.

Tras los dichos de Cristina, estos parecen ser días de definiciones en el Frente para la Victoria. Los primeros dos dirigentes que atendieron el mensaje de la jefa de Estado fueron Bossio y Sergio Urribarri. Ambos decidieron dejar de lado sus aspiraciones en pos del interés colectivo del partido. Al kirchnerismo le dejó una dura enseñanza la interna de la Ciudad de Buenos Aires: los siete candidatos que fueron a las urnas generaron una fuerte dispersión de votos que terminó jugando en contra de Mariano Recalde, el postulante de la Casa Rosada.