La Gobernadora y el Presidente estuvieron en Florencio Varela, y mostraron una actitud que marca la cancha en medio del conflicto docente.
Tras la polémica que despertó la convocatoria de voluntarios en las redes para hacer frente al paro docente, que hoy cumple su tercera jornada, la gobernadora María Eugenia Vidal y el presidente de la Nación, Mauricio Macri, visitaron un comedor comunitario atendido, precisamente, por un grupo de estas personas.
El encuentro, que tuvo lugar en Florencio Valera, se dio en el marco del Día de la Mujer, pero tuvo una fuerte connotación política por dos sentidos: se dio en un territorio de fuerte raigambre peronista, y subrayaron el valor del voluntarismo para llevar adelante el lugar.
Se trata del comedor «Medalla Milagrosa», que depende de la Fundación Padre Miguel y al que concurren unas 70 familias de bajos recursos, a donde Vidal y Macri fueron acompañados por los ministros de Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley; y la Provincia, Santiago López Medrano.
Desde la Provincia informaron que en el lugar funcionan un centro de jubilados, un jardín maternal y otro de infantes y también se organizan encuentros deportivos. Además, la organización tiene consultorio médico y odontológico, servicio de peluquería y apoyo escolar para niños y jóvenes del barrio.
Todo un gesto en medio del conflicto que el oficialismo mantiene con los gremios docentes, justo en el día en que la administración bonaerense convocó a los sindicatos a discutir mañana una nueva paritaria con el objetivo de dar por terminado el paro que ya lleva tres días.