20-12-2016

El día que a María Eugenia la “apalearon” por Salvai

Ella quería descorchar, se autoconvencía de que merecía un buen festejo. Mostraba una efervescente alegría, hasta ahora contenida por los sinsabores cotidianos de gestionar una provincia tan compleja como Buenos Aires.

villegas-salvai-y-vidal

María Eugenia le toma juramento a Villegas. Salvai mira y aplaude. Ahora, el ministro de Trabajo disparó munición gruesa contra el futuro Jefe de Gabinete.

Aun así, cuando cerró el acuerdo salarial con los gremios mayoritarios de la administración pública bonaerense (Upcn, Fejepba, Salud Pública, Soeme, Apoc, pilotos y gráficos), para el tramo final de 2016 y la paritaria para el año próximo, con un nivel de ajuste del 18%, ella estaba eufórica.

Su interlocutor, en cambio, lucía cara de pocker. Café de por medio, se mostraba complacido, entre mesurado y cauteloso.

Pero ella subía la apuesta. Transmitía emoción. El acuerdo con los estatales la colocaba en la pole-position de los gobernadores, al cerrar la cuenta más importante de las administraciones provinciales con meses de anticipación.

La moderación de su partener, aseguran, le cambió el humor: “Sabés lo que pasa, ustedes los ministros, se meten debajo de un felpudo y no salen a promocionar todas las cosas buenas que estamos haciendo”, le reprochó la gobernadora María Eugenia Vidal, al ministro de Trabajo, Marcelo Villegas, minutos después de haber cerrado la paritaria.

“No es así. Nosotros – por los ministros- queremos salir a mostrar gestión y el “Enano” que tenés al lado tuyo manejando todo, siempre nos pone palos en la rueda. Que esto no porque… que esto otro tampoco… Que eso lo vamos a manejar distinto. Siempre la máquina de impedir”, se despachó Villegas, sin anestesia, contra el hombre fuerte del gabinete de Vidal, Federico Salvai.

Primer round. Continuará.