02-03-2016

Detienen a vecino del Grand Bell por el asalto a la casa de Garro

La policía detuvo a un sospechoso que vive a metros de la casa del Intendente. Es un agente de la bonaerense que alquila la vivienda por 40 mil pesos mensuales. Un raro episodio. ¿Mensaje mafioso?

La policía bloquea el acceso al Country Grand Bell, donde fue asaltada la familia de Julio Garro, mientras el intendente se encontraba en el Palacio Municipal.

La policía bloquea el acceso al Country Grand Bell, donde fue asaltada la familia de Julio Garro, mientras el intendente se encontraba en el Palacio Municipal.

Dos delincuentes armados ingresaron a la casa del intendente Julio Garro en el interior del Country Gran Bell y maniataron a su familia, mientras el jefe comunal se encontraba en plenas funciones en el palacio municipal, informaron fuentes policiales.

Aunque todavía no están claros los detalles del episodio, la policía no sólo estudia la posibilidad del asalto; trascendió que también se investiga si el robo fue solo una excusa para mandar un mensaje intimidatorio de tono político mafioso. Pasadas las 18 horas, la Policía informó que habían detenido a un sospechoso por el asalto. Si bien no trascendió información precisa, se dijo que viviría en el mismo country Grand Bell, a metros de la casa de Garro, consigna en su edición digital el diario El Día de La Plata.

A todo esto, el portal de noticias Infopoliciales, desde su cuenta de Twitter, consignó hace instantes que el aprehendido por el grave hecho de inseguridad que puso en vilo la seguridad de la familia del jefe comunal platense, es un agente de la Policía de la provincia de Buenos Aires. Después trascendió que alquila en el Grand Bell una costosa y lujosa propiedad, por la que paga una renta mensual de 40 mil pesos.

Según las primeras informaciones desprendidas de fuentes calificadas, el hecho se produjo en el domicilio de Garro en el Country Grand Bell, ubicado en la zona de 467 y 144.

De acuerdo a los datos que trascendieron, los delincuentes llegaron a la casa del jefe comunal a pie, y ganaron la puerta del domicilio a punta de pistola, equipados con guantes y precintos para maniatar a la familia de Garro y evitar dejar huellas dactilares durante el asalto.

En el momento en que comenzó el robo, dentro de la vivienda se encontraba las cuatro hijas y la esposa del intendente, y su cuñada junto a sus tres hijos. Todas estas personas fueron inmovilizadas con los precintos, para luego ser encerradas dentro de una habitación de la casa, detalla la información publicada en la web de El Día.

Con los testigos fuera de la escena, los dos ladrones se dedicaron a revolver toda la casa para encontrar lo que habían ido a buscar; según comentó una fuente de la Policía, toda la casa quedó desordenada y revuelta.Finalmente los ladrones juntaron en un maletín – cuyo contenido no trascendió-, alhajas y una suma de dinero en efectivo, para luego huir del country a bordo de una camioneta.

Aunque aun restan realizar varias pericias para desentrañar los detalles del robo, los investigadores de la policía afirmaron que en ningún momentos los delincuentes dieron muestras de saber que se encontraban en la casa del Intendente. Sin embargo, de acuerdo a las fuentes, los peritos estudian también la posibilidad de que este robo haya sido un acto de intimidación que tenía como verdadero objetivo de mandar un mensaje «político» al intendente.

Al tomar conocimiento de lo ocurrido, el intendente Garro se fue de la Municipalidad y se dirigió a su casa para encontrarse con su familia.

En el curso de la tarde, seis patrulleros custodiaban el acceso al predio privado, mientras un cuerpo de peritos de la Policía bonaerense realizaba en la finca las tareas de rigor para establecer las características del ilícito.

Más tarde trascendió que la casa del intendente no fue la única asaltada; vecinos del Grand Bell que se comunicaron con El Día dijeron que también otra casa fue saqueada por los delincuentes. Aunque esto no fue confirmado de manera oficial, se dijo que los ladrones se colaron en otra vivienda del country y, al encontrarse con que el dueño estaba durmiendo, aprovecharon para llevarse todo lo que pudieron en el más completo silencio. En este caso, se dijo, la víctima del robo no fue maniatada ni amenazada.